la habitación estaba bien limpiada, aunque el aire acondicionado no funcionaba bien. costast nos ofreció agua fría y fruta.

Ambiente acogedor, atención excepcional, deliciosos desayunos – un lugar perfecto para relajarse.

La estancia fue maravillosa. El dueño fue muy atento y ofreció agua fría al llegar. Disfrutamos de un desayuno delicioso con mucha variedad de frutas. La habitación era cómoda y el balcón era perfecto para relajarse. Sin duda, volvería.

Recomiendo para quienes buscan un lugar acogedor

Tuve una estancia muy buena. Kostas y su familia son super amables y siempre dispuestos a ayudar. Me ofrecieron agua y frutas frescas cuando llegué, lo que me hizo sentir como en casa. Además, el desayuno era impresionante, siempre había fruta fresca y esos dulces griegos, que eran un verdadero deleite. Y claro, no puedo olvidarme de mi amplio balcón lleno de flores, pasando momentos tranquilos ahí.

No era barato, pero aún así bastante aceptable.

Ubicación excelente, a un paso da praia e do centro. Kostas, un encanto, sempre atento e ofrecendo auga fría. Desayunos ricos, frescos e variados. Queda a gusta, un sitio onde volver. Non llepo nada de queixa, todo perfecto!

me encantaría volver

Estuve en un hotel pequeño y tranquilo a solo 20 metros de la playa. Constantinos, el dueño, fue super atento, hasta organizó un recital de música tradicional. El desayuno era increíble, con mucha variedad de frutas. La habitación era cómoda, con un sofá y baño privado. Todo se sentía como en casa.

Un hotel pequeño y tranquilo, escondido en una callejuela a solo 20 metros de la playa. La cercanía al paseo marítimo del puerto es perfecta, se llega en un agradable paseo de cinco minutos. El desayuno es abundante y variado, lo que añade un buen toque a la estancia, y en general, el ambiente hace que uno se sienta como en casa.

A pesar de todas sus virtudes, el hotel no es la opción más económica, lo que puede ser un inconveniente para algunos. Además, la cercanía al mar significa también que hay que lidiar con el ruido ocasional de los transeúntes, pero no es algo excesivamente molesto. Por último, durante mi estancia, noté que algunas instalaciones podrían beneficiarse de una actualización para mejorar aún más la experiencia.

Este lugar me queda perfecto, ofrece wi-fi gratuito, bar y desayuno abundante. Recuerdo que en mi primera visita, el personal me ayudó con las maletas. Sin duda, recomiendo disfrutar de una velada musical. ¡Vuelvo por un fin de semana!

El hotel es encantador, ubicado a solo 20 metros de la playa, lo cual es muy conveniente. Constantinos, el dueño, se esfuerza mucho para que te sientas como en casa, incluso organizó una velada musical que disfrutamos mucho. La variedad de frutas en el desayuno fue un gran toque. Sin embargo, el aire acondicionado no estaba funcionando correctamente y la limpieza podría ser más exhaustiva.